Algunas veces se debe pensar que la competencia es un saco que no devuelve los golpes, pero lo único que pasa es que tras muchos asaltos ganándoles, resulta que en el momento decisivo ellos lanzan un golpe y te dejan K.O., sin tiempo para reaccionar, ya da igual lo que hagas después, porque ya HAS PERDIDO.
Lo mejor de todo es una vez te han vencido en tu territorio, en el que mejor dominas y en el que te creías invencible, para justificarlo lo que haces es: insultarlos y menospreciar lo que han hecho mejor que tú.
Así que más vale ser un poco más honrado, reponerse del golpe y tratar de mejorar, para que no te vuelva a pasar.
Esta entrada de blog debería titulares: «Zas, en toda la boca!»